Noticias
Diferencia entre dominación sensual y BDSM ¿Cuál es mejor?
Las relaciones sexuales tienen diferentes variaciones, pero todas con el mismo objetivo: dar placer y lograr un orgasmo. Y cuando nos referimos a esto en un entorno BDSM, podemos pensar en una escena donde hay un dominante y sumiso, sin embargo, hay parejas que lo hacen desde una perspectiva de «Dominación sensual». Aquí te explicamos de qué se trata.
La dominación sensual se basa en la estimulación de la mente y el cuerpo creando sensaciones en los 5 sentidos. En una relación de este tipo el sumiso y el dominante pueden cambiar de roles en cualquier momento.
Igual que el BDSM, el rol de la dominante es seducir y tomar el control, mientras que el sumiso tiene como propósito obedecer y complacer. Además, se pueden usar accesorios como esposas, cuerdas, dildos o velas. Lo que sea necesario para que la experiencia sea placentera y única.
¿Qué separa al BDSM de la dominación sensual?
La primera diferencia que separa por completo a estas dos tendencias es que las prácticas de BDSM se basan en dar placer a través de dolor, humillación y castigo.
En cambio, la dominación sensual se enfoca en la seducción y la recompensa. El dominante es agradable y tolerante. Aunque esto no quiere decir que se pueda ser salvaje en cualquier momento, va de la mano con los gustos de cada persona.
Foto: Artem Labunsky
Las dos comparten el uso de la palabra segura y el consenso entre ambas partes. Están permitidos los fetiches, ya que son parte del placer sexual.
La dominación sensual se puede tomar como práctica para tener una relación más íntima. Esto gracias al vínculo que se crea a través del afecto y la estimulación de forma gentil y emocional.
Incluso, para los practicantes del BDSM la dominación sensual puede ser un escape a algo más refrescante, donde pueden experimentar otro tipo de tendencias placenteras.
