Sexo Perverso (?)

Conferencia inaugural Lalexpo 2015. Cuarta parte.

En el quehacer webcam durante años primó el show sexual. Lo importante siempre fue ingresar a un privado, desnudarse rápidamente, abrir las piernas de cualquier manera y, en ocasiones, con exigencia de los miembros ser vulgar. Y no faltaba el cliente, o la modelo tomando iniciativa propia, que pedía terminar con un pepino cohombro del tamaño de una caña de azúcar entre sus piernas. O peor aún, con una botella de Pepsi, porque la Coca-Cola no le gusta, penetrándose hasta el fondo de sus entrañas. Afortunadamente tomando la precaución de quitar la tapa. Y ni hablar de la excitación sexual de las personas a las que les gusta comer mierda. Y no es figurado, es literal. Excitándose comiendo física mierda, o lamiéndola como si fuera una bola de helado. Un goce psicológico conocido como coprofagia. O sujetos que se masturban cuando otras personas orinan, una situación médica conocida como Urolagnia. Y hay muchas más, sin embargo, para no hacerlo extenso y aburrido no las mencionaré y seguiremos avanzando.

Nada de lo sexualmente aberrante me escandaliza. Soy de mente demasiado abierta. Considero que el ser humano no tiene linderos para el disfrute sexual. Somos nosotros quienes nos imponemos límites, viciados por la tradición milenaria de la moral conservadora, alimentada por un cristianismo que nos promete el infierno si somos paganos, si disfrutamos del cuerpo, si nos satisfacemos con sexo. Nuestra cultura durante siglos satanizó el sexo, y nos enseñó que el cuerpo es impuro, que dentro habita el pecado, que nuestro espíritu debe sufrir en él, y que estamos obligados a soportar las tentaciones carnales para ganar el cielo. Gran mentira. Y la creímos. ¡De rodillas! Para rezar, no para mamarlo.

En las sexualidades contemporáneas, facilitadas por la Internet y las nuevas tecnologías del siglo veintiuno, como modelo webcam tú puedes disfrutar privadamente de cualquier actividad peculiar y extraña. Es tu intimidad y nadie puede despojarte de ella. De hecho te invito a que lo hagas siempre y cuando no lastimes otros seres vivos, o te aproveches de los niños (o de los muertos, hay que respetarlos). Si la rareza te causa excitación estás en tu libre derecho de disfrutarlo. Lo único que te sugiero: No lo hagas durante tus shows de modelaje webcam, y más si estás en una página de tokens donde prevalece el show público con enfoque artístico. Reserva los deslices perversos para tu intimidad, y allí disfruta con el perro, el gato, o vistiéndote de cuero y recibiendo látigo (o dándolo). Y si lo quieres compartir y disfrutar con algún cliente, imprescindible que sea de tu absoluta confianza. Hazlo en un True Privete, un Skype Show, u otro medio donde no te expongas. Lo hardcore, lo pervertido, lo extremo, si lo quieres compartir con un miembro de la página, hazlo de la manera más privada y discreta posible. En tus show públicos tú debes ser la señorita, la dama, la Barbie Mimada. Ser la santidad personificada, bañada con el fulgor de la luz erótica y divina. No lo olvides.

Regocija tu cuerpo. Y si el deleite es muy peculiar no importa, es tu sexualidad, y es tan amplia y perversamente polimorfa, que finalmente la puedes disfrutar como quieras. Clínicamente, en el enfoque del psicoanálisis, todos somos enfermos sexuales, reducimos nuestras aberraciones al mínimo, a veces ni las conocemos, virtud de nuestra cultura donde prima la doble moral. Nos reprimimos y mentimos a nosotros mismos sobre todo aquello que posiblemente nos gusta. Sigmund Freud lo descubrió el siglo pasado, y sus descubrimientos fueron los cimientos de las nuevas teorías de la sexualidad, incluyendo, claro está, todo lo que nos ocurre en la esfera del modelaje webcam.