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Así es el mundo de una modelo webcam cucuteña
Carolina, modelo de 21 años, habló con el diario La opinión sobre su carrera en la industria del entretenimiento para adultos.
Colombia es un referente de modelos webcam, es el segundo luego de Rumania con la mayor cantidad de camgirls conectadas, y Cúcuta, aunque no es la ciudad con mayor número de modelos en el país, también ha sido expuesto a este fenómeno que cada día atrae a más mujeres.
Carolina, afirma que su trabajo es rentable y que significa para ella la posibilidad de reunir capital a la hora de retirarse del modelaje.
«Yo soy modelo de privados y me parece que en un principio cuando estaba estudiando nunca estuve de acuerdo en trabajar en las páginas de los tokens. Siempre prefería estar linda, verme coqueta, ser delicada y por eso existen las páginas de los privados que fue en la que tomé la decisión de empezar a trabajar», explica.
Contenta con el trabajo que realiza, dice haber descubierto su sensualidad, la libertad financiera y buenas ganancias.
Te dejamos el resto del texto del periodista Eduardo Bautista:
Carolinas vinculó al modelaje mediante una amiga que también es modelo webcam, sintiendo al principio muchos nervios de ser vista por su familia, o ser víctima del rechazo por el tabú sobre este oficio.
«Sin embargo, venciendo todos esos prejuicios dije: ‘bueno, pero al fin y al cabo nadie nos toca’, una está segura en el cuarto y no pasa nada mientras no demos información personal, porque realmente nunca se sabe con quién se está interactuando, y al otro lado de la pantalla podría estar un enfermo, un matón o cualquier tipo de persona».
Confiesa que llegó a una agencia de modelos en la que trabajaba su amiga, quien ostentaba cosas costosas y bonitas, ganaba buen dinero y colaboraba en su casa. Eso le hizo pensar en comenzar.
En el estudio al que llegó le explicaron cómo era que tenía que hacer, la manera de actuar ante la cámara para lograr muchos seguidores, entendiendo que lo que hacía no solo eran cosas de sensualidad, porque entre sus usuarios había hombres que decían sentirse felices solamente hablando con ella durante horas, sin tener que mostrase desnuda.
Carolina precisa que como modelo no está obligada a nada, aunque el usuario le pueda pedir infinidad de cosas, porque en las páginas de privado hay ciertas restricciones que dicen que contra la modelo no se puede atentar.
Foto: La opinión
Tiempo después, tomó la decisión de contarle a su familia el trabajo al que se dedicaba.
«Soy muy unida con mi mamá y mi papá y toda la vida hemos sido de mente abierta, por eso les expliqué cómo es el trabajo en un estudio para modelos web cam, les mostré dónde quedaba y ellos se dieron cuenta que yo estaba totalmente segura. Mientras no pase más allá y mientras yo esté produciendo están contentos», asegura.
Una profesión como todas
«En Cúcuta decir que uno es modelo webcam ya no es un escándalo y es como decir soy odontóloga o profesora, es algo normal, lo que pasa es que siempre hay personas que no entienden el concepto», dice esta mujer que una vez fuera del estudio no tiene ningún compromiso sentimental, asiste a clases de baile y sale con amigos, la mayoría gay.
El pago que recibe es quincenal y de acuerdo con las metas que cumpla como modelo. En la primera quincena de octubre logró hacerse $3,5 millones, «pero una siempre aspira muchísimo más, aunque con esa plata se resuelve un montón de cosas».
Al inicio trabajaba por las noches y le iba bien, pero ahora tiene el horario de las mañanas, porque le queda más tiempo para hacer otras cosas, como estudiar las materias de la carrera profesional que cursa a distancia.
El artículo también señala que en Cúcuta hay más de 200 estudios, que estarían funcionando de manera informal, de acuerdo con las declaraciones de Reinel Robayo, representante del estudio Femmes Interdites.
¿Cómo funciona?
Existen dos plataformas: de privados y de tokens, que es una moneda virtual y cada uno vale 0,050centavos de dólar.
Los usuarios son de Europa, Asia y Estados Unidos donde ingresan a las plataformas y mediante la interacción con las modelos deciden a cambio de entre 1 ó 10.000 tokens comprar sus servicios y hay usuarios que pueden gastar 2.000 dólares o más en una noche con una modelo.
Una modelo puede ganar entre 1 millón en adelante.
¿Quién puede ser modelo?
Cualquier persona que hay cumplido la mayoría de edad.
