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Sí, soy una mujer anormal por ser camgirl

Persona

#Amor a la webcam #No al Acoso Social

Sí, soy una mujer anormal por ser camgirl

Esta carta fue enviada a la sección de «Confesiones sexuales de las modelos webcam«, sin embargo, me pareció más oportuno vincularla en los temas de Bullying y acoso social. Gracias a la persona que la escribió y compartió con nosotros:

Muchas de las mujeres que hemos decidido ser modelos webcam, tenemos o tuvimos que enfrentarnos al hecho de confrontar a nuestras parejas para decirle a lo que realmente nos dedicamos. Muchas  de nosotras hemos tenido que tejer un entramado de mentiras por el miedo de decir la verdad y perder a esa persona que sentimos «amar» y que es «fundamental» para nuestra felicidad. Es claro, que el machismo es  algo arraigado a nuestra sociedad y por supuesto, muchos de nuestros novios, esposos, o como les queramos llamar, no están exentos de hacer parte de ello. Por eso decidí escribir esto a quien me rechazó, me juzgó por mi trabajo y nunca quiso escucharme:

¿Recuerdas cuando me decías lo importante que era para ti y lo mucho que me amabas?, ¿recuerdas los momentos que compartimos llenos de alegría y afecto?, ¿acaso crees que era otra mujer mientras estaba contigo? Déjame decirte que siempre fui, soy y seré la misma. No soy menos que las mujeres que llamas “dignas” y “normales” porque trabajan en una oficina y ejercen sus carreras, yo también soy profesional y decidí ser modelo webcam porque me dio la libertad de amarme y disfrutar de lo que soy como mujer.

No pretendo culparte, pero a tu lado vi la necesidad de cohibirme de muchas cosas, simplemente porque no quería que pensarás que concebir mi sexualidad de esta forma, de una manera libre y espontánea, me hacía una «mala mujer». Entiende algo, mi trabajo, si bien es un tanto diferente y rompe con los estereotipos sociales, pero no es algo que deba ser visto como algo malo.

Detrás de una modelo webcam hay una mujer que ama, sueña, llora, ríe, desea, se excita, fantasea, y lucha. Muchas son madres, tías, hermanas, pero no somos menos que nadie y merecemos el mismo respeto y amor que una mujer «normal», así que si para ti, el hecho de que me empodere de mi sexualidad, me sienta feliz y libre por ello te hace ver en mí una mujer que no vale la pena, te agradezco enormemente que te hayas marchado. Me da tristeza, no lo niego, sin embargo merezco tanto que sé que a lo mejor algún día llegará un hombre que sepa que amar no es atar ni cohibir, se ama cuando se es libre y si no llega, no hay problema. Siento el cariño y respeto de tantos hombres, que no creo que uno menos haga la diferencia. En fin, gracias por todo, pero tú te lo pierdes. Mujeres “anormales” y espléndidas, hay pocas.

Con amor y seguridad, se despide.

 Una “anormal y mala mujer”.

SkyrallBlue

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