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Meditaciones que elevarán el deseo de cualquier modelo

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Salud y Belleza

Meditaciones que elevarán el deseo de cualquier modelo

La meditación es un proceso de concentración en el que consigues el control interno de cualquier área de tu cuerpo y espacio emocional. Trabajas desde el inconsciente hasta programar tu “yo” activo en el ahora.

A través de la meditación cualquier persona puede programarse directo al éxito, así como también vaciar su peso emocional cargado de estrés y energías negativas.

Para aumentar la libido también puedes usar esta técnica de concentración y relajación. Solo es cuestión de hacerlo en el momento adecuado para que no haya interrupciones. Debes buscar el lugar indicado en el que puedas sentirte cómoda.

En Youtube hay una larga lista de música que son destinadas a la meditación, verifica que sea una que te agrade y que puedas utilizar para ello.

Esta técnica la puedes hacer acostada o sentada, en una posición muy cómoda para ti, utilizando además velas aromáticas para complementar el ambiente para un rato a solas contigo misma.

En la meditación sexual, lo ideal es hacerlo sin ropa, con el cuerpo cubierto de aceites esenciales  y comenzando con los ojos cerrados, luego trata de hacer un blanqueamiento mental, es decir, dejar a un lado cualquier pensamiento y combinarlo con  diez respiraciones profundas que van muy despacio desde la inhalación a la exhalación.

En tu mente visualiza tu cuerpo desnudo, trata de encontrar la luz interna y el color energético de tu cuerpo. ¡Es hora de usar la imaginación!

Deja volar tu imaginación y mantén en tu mente una visualización de tu cuerpo con colores que te gusten, así como formas abstractas, mientras tanto puedes jugar el ritmo de la música. Puedes irte mentalmente al mar y sentir con tus pies cómo la arena húmeda te acaricia la piel.

Trata de estar lo más consciente de cómo es tu cuerpo:

Luego de unos 20 minutos creando en tu mente las sensaciones más extrañas y agradables dejándote llevar por la música, puedes elevar tus manos por encima de tu cabeza y hacer una especie de pirámide (reposa en esa posición por 30 segundos).

Deja que tus brazos se deslicen lentamente uno sobre el otro, de allí relaja tu posición y comienza a jugar con tus brazos, manos y piernas, contrayendo y relajando los músculos, sintiendo cómo se mueve cada uno. Todo esto tratando de mantener los ojos cerrados y aguantando la respiración de modo intermitente, que te ayuda a acelerar los latidos del corazón y eleva el nivel de excitación.

Ahora bien, juega contigo misma, puedes tocarte, darte un abrazo y disfrutar de esa conexión que acabas de crear entre tu sensualidad y tu cuerpo. La meditación la puedes practicar una vez a la semana, para que vayas experimentando nuevas experiencias sexuales dentro de ti.

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