Un «gordito» me dio la noche más excitante de mi vida

Nos conocimos en un hotel un día que fui a hacer una publicidad. Desde que lo conocí me encanto su rostro, ojos azules, barba y tatuajes.

Una sumisa en mi fantasía lésbica

Muero por una chica dispuesta y húmeda como cualquier hombre lo haría, y aquí no solo empieza mi confesión, aquí arrancamos con la que es mi más grande fantasía

A pesar de tener una cara tan hermosa, pensé dentro de mí que estaba un poco «gordito», pero quizá solo un par de kilitos extra y,  aunque no soy de las personas que se fija solo en el físico, me habían molestado un poco esos cauchitos.

Esa misma noche había una fiesta en ese hotel. Habíamos quedado en vernos en allí. Estuvimos toda la noche juntos, me hizo reír mucho, me trato como una princesa. Me consentía, traía mis tragos, yo elegía lo que quería. La verdad fue genial.

A partir de ese día empezamos a hablar y luego de dos semanas hablando no nos pudimos ver más porque yo siempre estoy ocupada, estudiando o trabajando.

Sin embargo, nos mantuvimos hablando todos los días, sobre todo antes de dormir; la verdad, me hace reír muchísimo y eso es algo que me encanta. También tuvimos algunas conversaciones calientes, tanto así, que quede algo impresionada y con curiosidad de conocerlo más a fondo.

Después de todo ese tiempo sin vernos, decidimos pasar un rato juntos. Fumamos, empezamos a hablar, a conocernos más y escuchar música. Hablamos de sexo, y solo tocar el tema hizo que me mojara. Ese día no pasó nada, pero antes de irse, nos dimos un par de besos y de nuevo me mojé.

De nuevo estaba intrigada. Nunca había estado con alguien un poquito pasado de peso y me preguntaba ¿será que sí? ¿Será que no? Siempre me han gustado los hombres que van al gym y eso era nuevo para mí. Me dije a mi misma “Dejare esa estupidez de alguien perfecto físicamente y empezare a conocer alguien un poco más real. La verdad, estoy aburrida de niños musculosos con cara linda y malos en la cama. NADIE ME COMPLACE”.

Entonces no me aguante y, al día siguiente de aquel beso le escribí para vernos. Estaba muy curiosa por saber qué tenía él para mí y, la verdad desde que lo conocí sabía que era alguien diferente.

Nos vimos en la noche, fumamos otro porro nos fuimos a un hotel increíble. Bailamos, comimos y empezamos a molestar y él empezó a tocarme toda. Fue de otro nivel, pero hay un problema conmigo y es que nadie me complace, y él lo hizo.

Sólo quiero que me tome por dónde nadie ha podido

Soy una mujer algo tímida, pero con grandes deseos sexuales y fetiches. Sólo deseo tener mi primera vez por detrás con ese hombre.

Yo siempre uso juguetes como un plus para hacer de mis sensaciones más placenteras, pero esa noche no tenía juguetes, tampoco necesité de ellos, él me hizo el mejor sexo oral que he podido tener en toda mi vida, fue tanto mi placer que yo temblaba de lo que me hacía sentir y jamás había temblado antes.

Recuerdo que quizá una vez lo había sentido, pero ahora él lo había hecho mucho mejor, pero eso no es lo mejor, lo mejor es que yo puedo venirme muchas veces y sentir el placer muchas veces. Siempre quiero más y más y ayer tuve más, y fue más que suficiente.