Connect with us

Soy una modelo, pero también soy madre

#Amor a la webcam #No al Acoso Social

Soy una modelo, pero también soy madre

En nuestro blog hemos contado relatos de la vida real de modelos, madres, y familias que han tenido que lidiar con el ¿qué dirán? y con personas que han querido causarles daño. Son historias llenas de fuerza y valentía dignas de admiración y ejemplo.

En esta ocasión les narramos la experiencia de vida de una modelo a quien ser madre la impulsó a librar batallas para mejorar su bienestar, y brindar calidad de vida a su familia. A nuestra modelo la llamaremos Natalia.

Natalia, es una joven que vivió durante años en medio de la escasez, lo cual no le permitió tener la típica vida adolescente y, por infortunios de la vida, le había tocado iniciar en el difícil mundo de la prostitución a muy temprana edad.

 

Estuve un tiempo en la prostitución porque gran parte de mi vida sufrí de carencias económicas… viví cosas terribles, cuenta Natalia sobre esta etapa de su vida. Comenta que tiempo después conoció el modelaje webcam y esto le cambió la vida, pues ya nunca más debió ser tocada.

“Conocí este mundo del videochat a los 18 años con Flirt4Free. Comencé a trabajar en un estudio de Cali. Me gustó iniciarme en el modelaje webcam pues ya nadie me tocaba, pero la vida de la modelo nuevamente dio un giro cuando un año más tarde, le sorprendió la noticia de estar embarazada.

Dado su embarazo, la joven Natalia tuvo que abandonar su trabajo en línea para dedicarse a la maternidad. “Dos años después volví a la webcam, pues debido a la dura situación económica, había tenido que dejar a mi hijo muy pequeño al cuidado de otras personas… encontré un pequeño estudio y regresé al videochat”, comenta Natalia.

Gracias al esfuerzo y la dedicación tan pronto pudo, la modelo compró una computadora y una cámara. Empezó a trabajar desde su casa y esto le permitió tener los ingresos suficientes para tener a su hijo de vuelta, así como brindarle las atenciones y la calidad de vida que merecía.

En ese tiempo uno de mis primos me pilló trabajando en una de las páginas. Llamó y le contó todo a mi familia”, detalla Natalia que aunque no tuvo la aceptación de muchos e intentaron hacerle Bullying y someterla al acoso social, su felicidad la embargaba. “La felicidad de tener a mi hijo a mi lado y de tener un nivel de vida mejor para él y para mí, me dió el valor de enfrentarlos”.

Cuenta que todo terminó de forma muy graciosa pues a cambio de bullying al que la sometieron encontró una peculiar forma de afrontarlo y fue a través de frases ingeniosas como “¿te gustó?, ¿me veo bien en cámara?, ¿Qué hacías tú viéndome a mí en una página porno?”, y cosas que hicieron más amena la tensión que hubiera podido causar. Al final, todo terminó siendo un chiste, dice la camgirl.

El tiempo pasó y el hijo de Natalia creció, maneja el internet y los medios alternativos tanto como cualquier joven de 11 años de edad. Esto significó la toma de una decisión importante. Contarle a su hijo el trabajo al que se dedicaba.

Lea también: Una confesión con argumentos: Mamá, papá, soy una webcam

 

Mi hijo creció, ya no pude desviarle el tema ya que él preguntaba mucho acerca de mi trabajo. Hace más o menos un mes empecé a contarle de qué se trataba, él lo tomó muy natural”, cuenta la modelo.

Dice además que sabe que tal vez su hijo no se sienta orgulloso, pero gracias a esto no se siente presionada.  La modelo y madre, explica que conoce lo difícil que puede resultar para algunas sobrellevar el bullying social, afirma “me duele mucho que otras modelos se vean afectadas por estas cosas, a mi este trabajo me cambió la vida. Antes viví cosas difíciles, tuve que pasar por muchas deficiencias económicas. Sin embargo, hoy tengo mi casa y trabajo independiente. Además, esto me permite cuidar a mi familia 24/7, cosa que otro trabajo no me permitiría”.

Modelos y madres como Natalia, deben estar conscientes que sus hijos pronto crecerán, y que incluso probablemente sean más habilidosos en la tecnología de lo que tal vez nuestra generación llegue a serlo. Esto significa, que las madres webcam deben tener los argumentos válidos que permitan educar a estos jóvenes. Que deben tomar la decisión del tiempo en que será adecuado contarles el trabajo al que se dedican, y estar preparadas para responder sus preguntas.

Esto proporciona una importante ventaja. Protegerlos del bullying social al que ellos puedan ser sometidos algún día. Permite además brindarles herramientas para su defensa, para ser seguros de sí mismos. Esto solo puede funcionar si primero las modelos logran ejemplificar el amor propio y fraterno, que les conceda la capacidad de sobrepasar las barreras impuestas por la sociedad.

 

Más en #Amor a la webcam #No al Acoso Social

 

 

Lo más leído…

Etiquetas

 

Arriba
Conversa con Nosotros
Enviar